OOH que baño (Parte 18)

De repente Nines interrumpió  aquella romántica escena:
-Eric cuando subo todo lo que me has encargado, te recuerdo que thor ronda por aquí.
-Ostia, si Nines perdóname se me ha ido la cabeza ya subimos.

Nines era una señora de unos 50 y pocos años alta delgada con el pelo castaño y ojos muy grandes color ceniza. Bestia con unos tejanos desgastados una camiseta blanca y un delantal. 
Nines izo una inclino la cabeza para saludar a Valeria y esta le respondió de la misma forma.

-Vale, no te voy a poder enseñar el primer y segundo piso. Vamos gustos de tiempo a las 17 h, he quedado con el señor Tobías y tenemos que ir sin falta. 

-Joo, vale no te preocupes, pero quien es ese señor Tobías? La chica elevó la ceja izquierda.

-Ya lo veras, venga vamos que ya vamos tarde y tendremos que comer no? O no tienes hambre? 

-Si, la verdad. 

Eric tomo la mano de Valeria y subieron por las escaleras del centro de la casa hasta llegar al primer piso pero continuaron hasta el segundo . Enfrente de la escalera había una comanda con fotos de Eric y su hermano. De una mujer y un hombre que serian sus padres y un enorme espejo colgado de la pared. Valeria no había visto nunca a sus padres así que supuso que los de la foto serian ellos. Eric aun llevaba a Val de la mano, las puertas de aquella casa eran de madera oscura y Eric abrió una. Valeria se sobresalto, (me  a traído a su habitación, espero que Les no tuviera razón respecto a él seria un chasco gordo…) Les le había advertido que Eric era de los típicos chicos que enamoraban a las mujeres para tirárselas y luego dejarlas, si esto era así Valeria le pondría las cosas muy claras. 

-Tranquila no voy hacer nada que tu no quieras y no pienses cosas raras por esa cabecita que tienes tan imaginativa, siéntate en la cama un momento o quédate de pie si estas mas cómoda vuelvo en 5 min.  Eric estaba viendo la cara de Valeria de ‘’O dios tu no, no serás como todos’’ Eric salió por una puerta de doble abertura como la que tenia Val en su balcón.

La primera impresión de Vale al entrar en la habitación fue el color azul mar con el enorme ventanal que al parecer conducía a un balcón, aquella habitación era enorme en la parte derecha había dos puertas y mientras Eric no estaba Valeria abrió la primera, dio la luz y se quedo sin palabras. Un ropero que alomejor era igual de grande que su habitación –O dios mío yo quiero uno de estos en mi casa, pero este para que quiere tanto armario. Vale apago la luz y cerro la puerta y fue ah abrir la otra puerta, Valeria ya no ganaba para mas sorpresas eso no se podía considerar una lavabo normal y corriente. Las ráchalas del suelo negras y las paredes de piedra gris blancosa. Enfrente de la puerta había un armario blanco que iba desde la parte central del lavabo hacia la izquierda bordeando la esquina hasta llegar al váter,  el marmol era trasparente, la pica negra y un enorme espejo que ocupaba lo mismo que armario colgado de la pared. El váter era de color blanco y daba detrás de la puerta, a la parte derecha había una enorme bañera bueno más bien diría que era un jacuzzi bañera era enorme ocupaba medio lavabo hacia una forma un poco esférica para poder entrar bien y al lado de este una ducha mas practica por si iba con prisas pero ducha con hidromasaje no iba a ser menos. También de color blancos, incluso la alfombrilla era blanca. Valeria pestañeo y salió de aquel paraíso de lavabo antes que Eric llegara pero tarde cuando esta fue a girarse Eric estaba apoyado en el marco de la puerta.

-No te han dicho que no se registra en las casas de los demás y por tu expresión veo que te encanta mi lavabo cuando quieras nos pegamos una ducha juntos amor. Eric se relamió el labio parece que aquella escena le excitaba.

-mm, lo siento me dejaste sola y tenia curiosidad por ver lo que había detrás de las puertas. Val agacho la cabeza en señal de arrepentimiento pero en realidad era para que Eric no viera que estaba roja como un tomate por lo que le había dicho antes.

-No pasa nada, pero no vas a contestarme a lo del baño? Eric sonrío y en sus ojos se podía ver el deseo por coger a la joven y desnudarla allí mismo.

Valeria sonrío levanto la cabeza roja como un tomate y contesto. 

-Ya veremos. Y le giño el ojo derecho.